Un chico fue asaltado cuando iba en camino hacia la escuela
Más que un golpe a la inocencia
Ocurrió esta mañana en barrio Guadalupe. Al menor le apoyaron un revólver en la cabeza. Le robaron las zapatillas y la mochila escolar
El delincuente: un hombre de 30 años. La víctima: un chico, de 12.
Esta mañana, minutos antes de las 8, Emanuel salió como todos los días desde su domicilio en calle 12 de Infantería al 1100, en barrio Guadalupe.
Debía caminar una cuadra para esperar el colectivo que lo llevaría hasta el colegio Don Bosco donde cursa sus estudios.
Pero a poco de andar, Emanuel supo de lo peor de la condición humana.
El menor estaba en la esquina esperando el micro cuando observó a un hombre que pasó en bicicleta. Era un sujeto morocho, delgado, de unos 30 años aproximadamente.
Tenía puesto un buzo del tipo polar con la capucha levantada. Encima de la capucha llevaba puesta una gorra, que le cubría casi totalmente su rostro.
En principio el “ciclista” había pasado de largo. Sin embargo, tras unos instantes, apareció otra vez en escena. La pesadilla había comenzado.
Sin piedad
El rufián dio un brinco y bajó de la bicicleta. Lo que siguió fue una muestra de una crueldad sin par.
Con una de sus manos agarró al chico del cuello y lo levantó por el aire. En la otra mano el malviviente empuñaba un revólver. Apoyando el cañón del arma en la cabeza del menor, lanzó su grito de guerra: “¡Dame todo lo que tengas... la ropa... todo...”!
En tan dramático momento un automovilista pasó por el lugar y al observar el episodio comenzó a aminorar su marcha.
Esta circunstancia alertó al malviviente que decidió darse a la fuga con el “botín” logrado: las zapatillas del menor y su mochila de escuela.
“¡¡¡Mamá me robaron!!!”
Perla Bugliolo es la mamá de Emanuel, y quien relató que el chico regresó a su casa “descalzo, sin sus cosas y llorando”.
“Cuando vi a mi hijo en ese estado casi me muero del susto”, dijo hoy la mujer en diálogo con El Litoral.
Agregó que “no es la primera vez que nos roban. Hace algunos días también lo asaltaron y le sacaron su teléfono celular y unos pocos pesos.
Más adelante dijo que su situación es común al resto de los vecinos. “Aquí no sé qué está pasando, pero los robos y los asaltos son cosa de todos los días. Siempre nos enteramos de algún negocio robado o de que entraron en una casa de familia.
Pedimos por favor que la policía nos dé mayor seguridad. Vemos pasar los patrulleros, pero nunca llegan para “atajar” un penal.
Por último Perla salió en dirección hacia el colegio Don Bosco para reunirse con sus autoridades y detallar lo acontecido.
Más que un golpe a la inocencia
Perla, la mamá del chico asaltado, manifestó su hartazgo por los constantes robos que se producen en el barriO
Otro hecho de asalto callejero se produjo días atrás en la zona de Patricio Cullen y Antonia Godoy. La víctima fue una joven, de 20 años (Rocío), la que fue sorprendida por un sujeto que también la agredió físicamente. Tras darle unos golpes de puño el malviviente le sustrajo una cartera, que contenía documentación de la facultad, elementos de estudio, y un teléfono celular marca Samsung, para luego darse a la fuga en una moto tipo Enduro
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