Otra misteriosa desaparición

Estaba internado en Buenos Aires

Desesperada búsqueda

de su hijo Maximiliano

Elsa Flea solicitó ayuda a los medios locales para encontrar a su hijo adoptivo de 22 años, con el que no mantiene comunicación desde septiembre de 2009.

Hace 8 meses que no se sabe nada del joven, que en septiembre pasado abandonó una clínica de rehabilitación en Campana.

Foto: Gentileza

 

De la Redacción de El Litoral

sucesos@ellitoral.com

Elsa Flea reclama la colaboración de los medios de comunicación y de los organismos públicos, para que la ayuden a encontrar a su hijo Maximiliano Emanuel Flea, de 22 años, con el que no mantiene contacto desde el 12 de septiembre del año pasado. Hace ocho meses que no escucha la voz del joven muchacho, que se comunicó con su madre por última vez, tras abandonar la clínica de rehabilitación en la que estaba internado.

Maximiliano Flea padece un leve retardo mental y se encontraba bajo tratamiento por adicciones, según contó su mamá, que denunció el hecho en la Unidad de Información y Atención de Víctimas y Denunciantes, a cargo de la fiscal Mariela Jiménez. El caso se encuentra en el Juzgado Correccional Nº 4, del Dr. Ricardo Favaretto.

Elsa relató el rosario de penurias que debió atravesar desde 2008 a esta parte, cuando internó por primera vez a su hijo por problemas de adicciones. Primero lo envió seis meses a una institución de Rosario con una orden judicial; pero tiempo después comenzó a buscar un lugar más acorde a las necesidades del joven, que no daba muestras de mejoría.

Malos tratos

Contrató el servicio en un centro de rehabilitación a puerta cerrada ubicado en el country el Jaguel, y de ahí lo derivaron a la clínica Viaje de Vuelta, en Campana, provincia de Buenos Aires.

En ese lugar permaneció 9 meses desde el 4 de enero de 2009 hasta el 8 de septiembre del mismo año. Elsa iba una vez al mes a visitarlo y pagaba $ 800 mensuales para su atención. No obstante eso, la mujer asegura que los tratos que recibía de parte de uno de los empleados no eran los mejores, al punto tal que sostiene que lo expulsaron de dicho lugar sin siquiera hacerle un llamado.

Maximiliano venía de “una profunda depresión” que casi lo lleva al suicidio en julio pasado, confirmó la señora, que es enfermera jubilada. “Maxi tiene una madre presente”, dijo Elsa, en reproche a las autoridades de la clínica.

Último contacto

Entre el 8 y el 11 de septiembre pasado, la mujer tomó contacto con su hijo por última vez. Él le habría dicho: “Mami, me echaron como a un perro. Estoy en Retiro con Tatín” (un amigo del Remar). Ésas habrían sido las últimas novedades del joven, cuyo último paradero habría sido una pensión de la provincia de Buenos Aires.

Preocupada por las vicisitudes que le tocaba atravesar al muchacho, su madre le consiguió dos pasajes de colectivo para que junto con su amigo viajaran a Santa Fe; pero cuando lo llamó para decirle que les mandaba los pasajes “me contestó con un mensaje que decía “estoy bien, besos a todos’. Ésa fue la última vez que me habló, en septiembre”.

Siguiendo la pista del teléfono la mujer pudo conocer que el celular de su hijo se encuentra todavía activado, aunque no le acepta las llamadas. Los movimientos del teléfono lo ubican también en la estación de ómnibus de Retiro, en Rosario y por último en Paraná. Es más, hace cuatro meses que está registrado en las antenas de celulares de la provincia de Entre Ríos, lo que haría sospechar de su nuevo destino.

+ contactos

Quienes puedan aportar datos del paradero de Maximiliano Flea llamar a los teléfonos (0342) 4894268; (0342) 155-080447, o contactarse con la Secretaría de Derechos Humanos de Santa Fe, a su línea gratuita 0800-555-3348, durante las 24 horas.