lunes, 26 de abril de 2010

Crece la Inseguridad.

Alarma por la seguidilla de robos y asaltos en los comercios
La ley del “dame todo o te quemo”
Dos panaderías, una agencia de quiniela y un supermercado fueron víctimas de la delincuencia en las últimas horas. Crece la preocupación.
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La agencia de quiniela de Av. Freyre al 3000. Un delincuente encañonó al encargado y se llevó toda la recaudación.
Foto: Pablo Aguirre
 
Danilo Chiapello
dchiapello@ellitoral.com
Los delincuentes siguen imponiendo su ley: “dame todo o te quemo”. Así lo explican los numerosos asaltos a comercios de la ciudad ocurridos en las últimas horas.
Al límite
* Franco Colella es un empresario panadero que hoy se muestra harto. Y su actitud es entendible. Anoche, los cacos volvieron a hacer de las suyas en uno de sus locales.
Minutos después de las 19, un sujeto irrumpió en la sucursal ubicada en Corrientes y 1º de Mayo. Tras simular una compra sacó a relucir un arma de fuego y embistió contra la empleada, una joven de 20 años, a quien le sustrajo el dinero de la caja.
Logrado objetivo el rufián escapó del lugar en dirección hacia el sur.
“Esto ya no da para más. Estoy harto -dijo Colella. Ahora mismo voy a reclamar medidas ante las autoridades municipales. También voy a pedir una audiencia con el ministro de Seguridad. No puede ser que no podamos trabajar. Me están llevando al límite de tener que cerrar una fuente de trabajo”, sentenció.
Más adelante, el empresario se refirió al estado de incertidumbre que reina entre sus empleadas. “La sucesión de ilícitos dejó su huella entre el personal a mi cargo que ya desconfía de todo el mundo. Ven a cualquier pibe con gorra y no le quieren abrir la puerta”.
“Para colmo hay muchas de las chicas que aparte de ser víctimas de robo mientras trabajan en la panadería, también fueron asaltadas cuando se retiraban. Les robaron las motos y sus pertenencias”.
En una agencia de quiniela
Poco después, se tuvo noticia sobre otro hecho ocurrido en una agencia de quiniela, de Av. Freyre al 3000.
Aquí también las acciones corrieron por cuenta de un individuo, de unos 25 años, el que arribó a bordo de una motocicleta.
Pero a poco de arribar sacó un arma de fuego con la que encañonó al encargado, un hombre de 39 años. Tras amenazarlo de muerte le sustrajo dinero en efectivo y un teléfono celular. Finalmente, se dio a la fuga a toda velocidad a bordo del rodado con el que había llegado.
A punta de cuchillo
* La panadería Balear, de 9 de Julio y Junín, tampoco escapó a esta oleada.
Aquí las cosas estuvieron a cargo de dos malvivientes los que, a punta de cuchillo, lograron hacerse del dinero de la caja y una leche chocolatada.
En plena fuga, los cacos se subieron a un colectivo y fueron aprehendidos a las pocas cuadras. Se les secuestró el arma utilizada, aunque no se pudo recuperar el dinero.
* Por último, se supo de otra incursión delictiva que se consumó la tarde del viernes en el supermercado Kilbel, de Urquiza y Uruguay. Con suma violencia, dos delincuentes asaltaron a tres empleados de la firma, a los que despojaron de una riñonera en la que llevaban dinero en efectivo.
Los autores del robo fugaron luego por calle Uruguay hacia el oeste, sin que se tengan novedades en cuanto a sus capturas.

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En la panadería Franco Colella (de Corrientes y 1º de Mayo) anoche actuó un delincuente solitario. Los empleados están desesperados.
Foto: Pablo Aguirre
Vendía frutas y lo acribillaron
Un verdulero ambulante fue acribillado a tiros en medio de un violento asalto ocurrido en la zona noroeste.
La víctima resultó ser Antonio Adolfo Torres, de 49 años. El nombrado se encontraba vendiendo frutas y verduras en una chata de 4 ruedas en Presbítero Pérez al 8200, esto es en inmediaciones de barrio Las Lomas.
Todo transcurría bien hasta que en un momento dado irrumpió en la escena un sujeto armado el que, bajo amenazas, intentó apoderarse de la recaudación.
El verdulero quiso escapar, pero fue entonces cuando el rufián realizó numerosos disparos que impactaron en el cuerpo del trabajador.
Torres cayó al suelo acusando impactos de bala en el abdomen, brazo derecho y espalda a la altura del hombro derecho.
El autor de tamaña acción se dio a la fuga. Por su parte la víctima debió ser llevada con urgencia hasta el hospital Cullen donde quedó internada en observación.

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